El fútbol es de momentos y, sobre todo, de decisiones. Mientras algunos aprovechan las oportunidades cuando se asoman, otros siguen esperando que el escenario ideal aparezca. Así, mientras Marcelo Flores intenta abrirse paso en Tigres, dos de sus antiguos compañeros en la Academia del Arsenal disfrutan las mieles de la UEFA Champions League, tras eliminar nada menos que al Real Madrid.
Myles Lewis-Skelly y Ethan Nwaneri, dos nombres que hace apenas un par de años compartían vestidor con el mediocampista mexicano en las categorías juveniles de los Gunners, hoy son protagonistas de una de las sorpresas más sonadas de la temporada europea. Con apenas 18 años, ambos formaron parte de la plantilla que firmó la hazaña de dejar fuera a los merengues en los Cuartos de Final del máximo torneo continental.
Marcelo, por su parte, vive una historia distinta. Con 21 años, el talentoso volante ofensivo mexicano pasó de entrenar bajo la mirada de Mikel Arteta y ser considerado para la banca en partidos de Premier League, a buscar minutos en la Liga MX, en un Tigres que exige y no perdona. Tras un paso sin mayor brillo por el Real Oviedo, el canterano de Hale End regresó a Londres solo para ver cómo sus ex compañeros comenzaban a escalar mientras él tomaba otro rumbo.
Y es que la vida en las academias de clubes europeos es una constante competencia. En su momento, Marcelo Flores compartió cancha y sueños con Lewis-Skelly y Nwaneri, ambos menores que él pero igual de talentosos. La diferencia, quizá, fue el momento preciso y la confianza del técnico. Nwaneri, por ejemplo, debutó en la Premier con apenas 15 años, haciendo historia, mientras Lewis-Skelly se ganó su lugar en el primer equipo antes de cumplir los 18.
Hoy, con Arsenal instalado en las Semifinales de Champions y sus jóvenes joyas brillando, Marcelo sigue peleando por un sitio en un equipo regiomontano que busca rejuvenecer su plantel pero que también exige resultados inmediatos. Mientras en Inglaterra celebran el ascenso de dos 'niños' que hace poco veían en Flores a un líder en las categorías inferiores, en la Liga MX, el mexicano intenta recuperar el tiempo perdido y demostrar que su talento no quedó enterrado en los campos de Hale End.
Así es el fútbol: mientras unos suben al escenario europeo, otros siguen tocando puertas. Y la pelota, caprichosa, siempre encuentra nuevas protagonistas.